¡Hola a todos! Hoy os traigo una receta perfecta para reuniones familiares y comidas entre amigos, una lasaña. Sin embargo, he decidido a darle un toque especial para sorprender a los invitados, así que la he rellenado con una exquisita mezcla de pollo con curry y Castello Pimienta … ¡Os va a encantar y es muy fácil de preparar!
Ingredientes de lasaña de pollo al curry para 6 personas:
- 3 pechugas de pollo pequeñas enteras
- 1 queso Castello a la Pimienta
- 1 sobre de Finello Mozzarella
- 12 láminas de lasaña de espinacas precocidas (sirven perfectamente las normales, es solo por aportar un poco de color)
- 200 gr. de tomate frito
- 1 cebolla grande
- 1 puñado de pasas de Corinto
- 10 gr. de curry en polvo
- 1 pellizco de sal
- 1 chorrito de aceite de oliva

Lasaña de pollo al curry
En primer lugar, ponemos a cocer en agua con un poco de sal las tres pechugas en agua, durante 20 minutos. Mientras, picamos la cebolla finamente y la pochamos lentamente en una sartén amplia, hasta que esté transparente. Reservamos.
Retiramos las pechugas de la olla y la desmenuzamos con un tenedor (o a mano, aunque en ese caso tenéis que esperar a que se enfríen). Incorporamos el pollo a la sartén y rehogamos con la cebolla durante 3-4 minutos. A continuación, agregamos el curry y las pasas de Corinto y removemos hasta que toma un color homogéneo.
Ahora ponemos el pollo en un cuenco y añadimos el Castello a la Pimienta en porciones. Mezclamos hasta que se integre completamente, ajustamos de sal si es necesario y ya tendremos listo el relleno.
Pasamos a montar la lasaña. En una fuente de porcelana o de pírex, ponemos una capa fina de tomate frito.
Colocamos la primera capa de láminas de pasta, sobre ella ponemos el relleno, y seguimos montando las placas hasta que lleguemos al final (tened en cuenta que usamos placas de pasta precocida, si queréis usar placas normales habrá que cocerlas primero, y pasarlas más tarde a un paño de cocina limpio para que se enfríen).
Cubrimos el último piso con el resto del tomate frito, y llevamos al horno, que deberá estar precalentado a 200º, con la potencia solo en la parte inferior.
Al cabo de 20 minutos, retiramos del horno y le añadimos la mozzarella rallada. Lo volvemos a hornear, y esta vez le damos potencia a la parte superior para gratinar. En 5-10 minutos estará doradita y lista para sorprender a los invitados. Es una lasaña jugosa y con un toque exótico y cremoso… ¡Un éxito seguro!